Víctor Marrero gana el II Champions Trophy Mercedes-Benz Victoria de Golf Las Américas.
Víctor Marrero Suárez del Real Club de Golf de Tenerife, se ha proclamado vencedor absoluto del II Champions Trophy Mercedes-Benz Victoria de Golf Las Américas.
El II Champions Trophy se ha disputado hoy en Golf Las Américas, torneo que prácticamente cierra el año golfístico en el maravilloso campo tinerfeño.
Como el año pasado, algunos jugadores eran invitados a jugar la prueba, como los ganadores de los torneos que celebra Golf Las Américas en el año en curso y los mejores de la provincia de Tenerife también en 2023.
El viento que sopló con dureza protagonista inesperado.
Día espectacular con sol radiante y 22ºC de temperatura, con un campo que parecía una alfombra y todo el staff de Golf Las Américas en «modo competición», que es como les gusta a ellos denominar cuando se involucran al 100% cuando llega un torneo a su campo.
Vendaval que endureció el campo de una manera increíble, haciendo que en los hoyos 2, 3, 4, 7, 8, 11, 13, 15, 17 y 18 se jugara con el viento de cara, lo que hizo que los jugadores dependiendo de la hora por la que pasaban por esos hoyos tuvieran que coger hasta 3 palos más para completar la distancia.
Como todo lo que hace Golf Las Américas, el evento salió perfecto en todos sus detalles, con una organización que brilló y a la que dejó a todos los participantes con un muy buen sabor de boca.
Welcome pack.
Desde poco antes de las 10 de la mañana comenzaban a llegar los jugadores al campo. Eran recibidos por el personal del campo en la Casa Club y hacían entrega del Welcome Pack que estaba compuesto por un sombrero, una toalla para la bolsa de palos y una botella de cristal con recubrimiento de neopreno, todo de la marca Mercedes-Benz.
Primeros saludos y sonrisas en las caras de los participantes que sabían que comenzaba un día lleno de sorpresas.
Muchos curioseaban un poco entre los modelos de coches que Mercedes-Benz Victoria había colocado en diversas partes del campo y que fueron de lo más interesantes, sobre todo los eléctricos.
Calentamiento y puesta a punto.
La siguiente etapa como en cualquier torneo de golf, fue pasar por el campo de prácticas y el putting green para calentar un poco y afinar puntería. Toma de contacto con esos compañeros inseparables que son los palos de golf del jugador, que unas veces te los llevarías de fiesta y otras los tirabas al lago más cercano que tuvieras.
Inicio de la competición.
Pasadas las 11:20h, salía la primera partida al campo que era la de los patrocinadores. Por detrás 17 partidas de 4 jugadores para dilucidar la victoria en el torneo.
Posteriormente salían por orden de hcp María Velázquez, Noel Calzadilla, Conor Flaherty y José Royo, con todo el campo por delante para hacer los menos golpes posibles y con el peso de encontrarse entre los favoritos a la victoria, lo que añadía peso en la bolsa.
A continuación el resto de participantes hasta las 13:16h., que era la hora prevista para el último grupo.
Como decíamos en las previas, durante el recorrido había un punto de avituallamiento a la salida del green del 9, para que todos los jugadores pudieran ir recuperando fuerzas. Comida y bebida para no desfallecer, que a más de uno se le olvida y al final de la ronda se queda sin «gasolina».
Conor Flaherty con opciones claras de triunfo hasta el 17.
Al llegar al tee del hoyo 17 Conor iba +5 de campo brutas con muchas opciones de triunfo. Por delante un par 4 corto pero con viento lateral de la izquierda casi en contra que dificultaba el hoyo por el hazard que lo recorre por todo su lado derecho.
Driver fue la elección de palo de Conor para jugar una bola al draw (efecto de derecha a izquierda). La bola no hizo lo que se pretendía y se fue al agua de cabeza.
Al llegar a la zona de caída de bola observó que la bola estaba en el borde del hazard con más de media bola cubierta por el agua y decidió jugarla desde allí.
El golpe tenía una dificultad máxima y las estadísticas se cumplieron. La bola no salió y tuvo que dropar.
Cuarto tiro con poco hueco para tirarla a green pero se la jugó… y de nuevo la mala suerte se presentó: tocó una rama de palmera y de nuevo se fue al agua a escasos 10 metros de donde había jugado.
De nuevo a dropar y esta vez ya la pudo llevar al rough del fondo de green, desde donde pudo chipear y hacer dos putts con el sand puesto que no cogió el putter, y terminar con un 9, que enterraba cualquier opción de triunfo.
Hubo para todos.
Pero no solo Conor tuvo problemas. Todos los jugadores en algún hoyo se liaron, con bolas injugables, hazards que atraían magnéticamente a las bolas y efectos extraños producidos por el fuerte viento reinante.
En la foto anterior, vemos a María Velázquez en el hoyo 3, que también visito el hazard con la fortuna de que se quedó al principio y pudo jugarla desde allí. Hoyo por cierto en el que todos menos Conor tuvieron problemas, puesto que la citada María, Noel Calzadilla y José Royo, jugaban sus segundos golpes a colocar por quedarse bloqueados por los árboles que rodean ese hazard de la izquierda del hoyo.
Gestión de resultados.
Llegada de los jugadores a la zona de recogida de tarjetas donde alguno estaba contento como unas castañuelas y otros usaban de paño de lágrimas al primero que se acercaba porque el día había sido muy duro.
Posteriormente tiempo para la ducha y la relajación tomando algo en la cafetería del campo hasta la llegada de la última partida y posterior entrega de premios. Allí se concentraron prácticamente todos los jugadores para contarse sus vueltas y ver las posibilidades de triunfo algunos.
Casi a oscuras.
Como anécdota destacar que las últimas partidas del día llegaron con la luz justa para acabar, teniendo que utilizar la organización las luces de los coches que estaban expuestos en el green del 18 para iluminar el mismo, dando la nota de color al torneo y haciéndolo imposible de olvidar.
Entrega de trofeos.
Una vez que todos los jugadores hubieron terminado y las tarjetas de resultados fueron procesadas, comenzó el cóctel y la entrega de trofeos en los salones del campo.
En lo que respecta al tema deportivo, en categoría Platinum estos fueron los primeros clasificados:
Scratch
Primer Clasificado Scratch Indistinto Víctor Marrero Suárez
Víctor tenía un compromiso familiar y no se pudo quedar a la entrega de trofeos, por lo que no tenemos sus impresiones del torneo.
Mención a la Primera Dama Scratch Giulia Belfontali
Categoría Platinum
Primer Clasificado Scott Beasley
Segundo Clasificado Johannes Fohrenbach
Tercer Clasificado Andreas Adams
Categoría Gold
Primer Clasificado José Manuel Estévez Rivero
Segundo Clasificado Miguel Ángel Arvelo Afonso
Tercer Clasificado Javier Cabrera Raya
Giulia Belfontali radiante de felicidad.
Al finalizar el acto pillamos a Giulia para que nos dijera unas impresiones rápidas del torneo y esto fue lo que nos contó:
Sorteo de regalos.
Una vez concluida la ceremonia de entrega de trofeos se realizó un sorteo de regalos entre los jugadores asistentes.
Estancias en el Hotel Las Madrigueras Resort & Spa, relojes y merchandising de Mercedes-Benz, bonos de wellness de Belleza Elixir, material de golf y una cesta de Navidad del Centro Comercial Safari fueron los regalos que se llevaron los agraciados.
La entrega de la cesta fue realizada por Juan Luis Ibern, Responsable de Comunicación y Marketing de Golf Las Américas y Safari Shopping Center y otro pilar de la base del campo.
Fin de fiesta.
Después de la entrega, un DJ amenizó el final de un día muy especial en un campo muy especial y con una compañía muy especial.
Cuando el campo es espectacular, la organización es de sobresaliente y el ambiente es muy acogedor, el resultado sólo puede ser exitoso, como lo fue esta II Edición del Champions Trophy.
El muy buen sabor de boca con el que se fueron todos los participantes fue directamente proporcional al cansancio con el que se fueron todos los que trabajaron para que el torneo saliera así de redondo.
Equipo de trabajo de lujo.
Ana Reyes Mendoza, Juan Luis Ibern y Roberto Pérez encabezando como siempre un equipo que se desvive por sus, yo diría que algo más que clientes, puesto que el trato que recibe el jugador nada más entrar por recepción es muy familiar.
Señalar que Roberto Pérez fue el que coordinó el encendido de las luces de los coches en el green del 18, sufriendo lo indecible porque pensaba que no se iba a poder terminar el torneo por falta de luz.
La perfección llevada a torneo de golf en el que la frase más repetida cuando salían los jugadores era “…el año que viene tampoco me lo pierdo” que dice mucho de la prueba.
Enhorabuena a los campeones y nos vemos el año que viene.