Gracias a los profesionales Octavio Rodríguez y José Juan Boissier del Real Club de Golf de Las Palmas y a Eduardo Galván y Eduardo Santos del Real Club de Golf de Tenerife.
Ninguno de los dos es bueno según los profesionales. Bueno, gana Bandama a los puntos, sobre todo ahora que le han instalado el Toptracer, pero vamos a explicarlo bien.
Según los profesionales a los que le hemos consultado los dos son buenos campos de practicas para dar clases y entrenar, pero no son lo más idóneo. Tener un campo de prácticas en desnivel (el de Bandama tiras a un barranco como se aprecia en la foto de al lado) hace que tu percepción de altura de la bola sea errónea puesto que no tienes la referencia del suelo y si te fías de dónde cae la bola la distancia realizada por la misma será mayor que si tiraras en plano. Esto hace que tu swing se adapte y tiendas a mandar bolas un poco más bajas puesto que tu mente compensa la diferencia de altura.
La forma de corregirlo es imaginar que el suelo del campo de prácticas de Bandama se prolonga hasta el principio de la calle del hoyo 2 que es el que tenemos justo enfrente. Así tendríamos una referencia clara de la altura que está alcanzando la bola. En cuanto a la distancia lo ideal sería llegar a la calle del 2 (peligroso) y así tendrías todos los parámetros correctos pero como esto no puede ser, lo único es poder entrenar línea, altura y dispersión.
Ahora con el Toptracer que han instalado, los datos que nos proporciona nos da una idea clara de lo que está haciendo la bola y de las correcciones que tenemos que hacerle a nuestro swing, para lo que hay que desconfiar de nuestra visión y hacerlo plenamente de la multitud de datos que el Toptracer refleja.
Si pasa el caso contrario que es lo que nos encontramos en El Peñón (campo de prácticas en subida como se aprecia también en la foto), lo que nos ocurre es todo lo contrario. Al tener enfrente una loma que no para de subir hasta el final del campo de prácticas, la referencia de caída de la bola no es correcta.
Es como si estuviéramos tirando a un hoyo que se encuentra en alto. Cuanto más lejos esté el hoyo más slope hay que añadir. Es decir, que si en llano para 120 metros a bandera usamos un Pw, hierro 9 o un hierro 8 según la pegada de cada uno, si el hoyo está a 30 metros de altura esos 120 se pueden convertir en 130 o 135, por lo que para llegar al hoyo hay que coger uno o dos palos más.
Trasladado al campo de prácticas del Peñón, la diferencia de puntos de impacto en la loma con los diferentes hierros será cada vez menor. Es decir, que nunca haremos la distancia correcta con los palos porque la bola se va a encontrar con una pared en forma de montaña que para literalmente la bola y no deja recorrer los metros que le faltan hasta llegar a la horizontal, que está situada justo al nivel desde donde estamos tirando.
Todo ello provoca el llamado «Swing Peñonero», que no es otra cosa que el intentar levantar la bola con las manos y el cuerpo en vez de confiar en que la cara del palo hará todo el trabajo. Si se fijan sobre todo en jugadores del Peñón de hcps medios o medios-altos lo verán seguro en alguno de ellos. En los hcps bajos es más complicado verlo, aunque alguno también le aparece de vez en cuando.
La solución parcial para el campo de prácticas del Peñón y que paliaría un poco la situación, sería instalar un segundo piso en el techo del actual tirabolas. Esto haría que como tiras desde más alto, tu mente no crea la necesidad de «levantar la bola» y así no actives manos y cuerpo a destiempo.
Como decimos es un parche, puesto que al fondo seguiría estando la loma-montaña, pero por lo menos ayudaría al jugador (sobre todo el que empieza) a ver desde un punto de vista más real el lanzamiento de la bola.
¿Qué han hecho los profesionales del Real Club de Golf de Tenerife? Ponerle imaginación al asunto y copiar a Bandama colocando varias alfombras en la parte superior del campo de prácticas. Con ello provocan el efecto contrario a tirar desde abajo. Como estás en altura te hace pasar mejor a través de la bola y el impacto bola suelo se mejora bastante.
Lo hemos probado y les podemos asegurar que las sensaciones son completamente distintas, haciendo que veas la bola volar mucho más tiempo de lo que lo hace si tiras desde abajo. No intentas levantar la bola lo que disminuye o incluso hace desaparecer el antiestético «Swing Peñonero.» Eso sí, más de un hierro 8 no puedes pegar porque la metes en las alfombras de la parte baja.
La solución definitiva sería hacer un desmonte de tierra y allanar el campo de prácticas, algo por ahora inviable porque habría que comerse un trozo de montaña.
En el canal de YouTube Física y Química, describen matemáticamente lo que ocurre con la bola de golf en el tiro parabólico. En el siguiente vídeo tenéis la explicación matemática paso a paso.
En definitiva, que tener un campo de prácticas en llano es lo ideal (en Canarias tenemos muchos de ellos excelentes) que hace que no cojamos vicios, cosa importantísima sobre todo para los que empiezan en este deporte.
Que casi es preferible tenerlo en desnivel (Bandama) que en altura (Peñón) por lo que nos quedamos con el primero y nos vamos para allá a tirar un cubito de bolas.
0 comentarios